martes, 18 de marzo de 2014

El símbolo Shaka

Cualquiera que haya visitado las islas, sin duda alguna vio el famoso gesto con la mano asociado con el saludo “¡shaka, brah!”. Un signo shaka - el saludo inconfundible con el dedo meñique y el pulgar - es un símbolo de aloha y forma parte de la cultura local de Hawaii. Se interpreta como “tómalo con calma” o “excelente”, el shaka es un recordatorio constante que en Hawaii no es una norma el apurarse o preocuparse. El símbolo shaka representa el “estilo de la isla”. Representa que todo está bien.

Desde los surfistas y los keiki (niños) hasta los cajeros y los presentadores de noticias, el signo shaka es universal en las islas. El signo shaka es más que una comunicación no verbal. Cuando se usa, se acepta el concepto verdadero de aloha y se participa en el sinérgico latido del corazón de Hawaii.


Los Orígenes del Shaka

Hay un gran debate acerca del origen del shaka, a pesar de que la mayoría concuerda en que sus raíces lo conectan con el surf y la cultura de la playa. Una de las versiones cuenta que el shaka fue usado por primera vez en la década de 1940 como símbolo de bendición por un héroe popular hawaiano llamado Hamana Kalili de Laie, a quien le faltaban los tres dedos del medio de su mano derecha debido a un incidente en un molino de azúcar.

Otros debaten que el símbolo nació cuando Kalili agitó su malformada mano para ahuyentar a los niños que saltaban del tren. Una tercera versión dice que el shaka nació cuando uno de los primeros surfistas de Hawaii asomó el dedo meñique y el pulgar afuera del agua después de que un tiburón hambriento le arrancara los tres dedos del medio. Hay incluso otra versión que cuenta que su origen tiene que ver con los inmigrantes españoles, quienes plegaban los dedos del medio y se llevaban el pulgar a los labios como gesto amigable que simbolizaba el hecho de compartir un trago con los nativos que encontraban en Hawaii.

Cualquiera sea el origen de este poderoso símbolo, permanece un fuerte recuerdo del espíritu aloha que hace a Hawaii tan especial. El shaka ha trascendido muchas generaciones y continúa uniendo a los amantes de las islas con una única tradición que no se encuentra en ningún diccionario.

El nombre “shaka” apareció más tarde, en 1960, cuando fue usado como cierre de un anfitrión de la televisión local de Honolulu, Lippy Espinda; aunque algunas personas creen que la palabra “shaka” deriva de un buda antiguo llamado Shakyamuni, quién rezaba juntando sus manos y formando dos shakas. Otra historia cuenta que la palabra “shaka” deriva del término "shark eye", un elogio tradicional que se da a los miembros de la familia y a los amigos cercanos. En 1976, el candidato a alcalde Frank Fasi popularizó rápidamente el símbolo a lo largo de las islas después de diseñar su campaña alrededor del shaka.

El shaka es una simple pero poderosa manera de recordar a los locales y a los turistas la manera en la que los isleños cuidan a los demás en Hawaii. También es una forma de esforzarse para esparcir aloha todos los días y mantener el principio hawaiano de "malama i kekahi i kekahi" (cuida a uno, cuida a todos.)

Shaka y el surf

Cuando la cultura del surf creció y se extendió a través de California y Estados Unidos, durante el soleado 1960, un gesto nuevo fue ganando aficionados. Los surfistas de Hawai comenzaron a saludar a los demás conductores y amigos con una muestra de la mano original.

Prevaleció como signo del surf y se expandió a Europa, Oceanía, Asia y África. Shaka se hizo famoso en los deportes de agua. Cuando los presidentes de los EE.UU. usaron el Shakas, el boom fue universal.


lunes, 17 de marzo de 2014

HUNA NO ES HAWAIANO

Huna no es una palabra hawaiana.
Huna no es de la palabra Ka- HUNA . No es la antigua espiritualidad hawaiana. Huna NO es una tradición hawaiana indígena. Huna tiene muchos impactos negativos en la gente de Hawai que contribuyen al etnocidio de nuestro pueblo y la cultura , y la práctica es cada vez mayor.

Huna es una palabra hawaiana adoptada por Max Freedom Long (1890-1971) en 1936 para describir su teoría de la metafísica que se vincula a las antiguos kahunas hawaianos ( expertos ) . Es parte del movimiento del Nuevo Pensamiento .





Llegó a Hawai en 1917 para trabajar como profesor, y se interesó en las creencias y prácticas religiosas de los Kahunas, pero fue incapaz de penetrar en el funcionamiento interno de esta religión. Salió de Hawaii en 1931, convencido de que nunca aprendería estos secretos . En 1934, se despertó con una revelación que los secretos se codifican en la propia lengua hawaiana . Llamó al sistema religioso que se desarrolló a partir de esta revelación ' Huna ' (la palabra hawaiana para  secreto) , y escribió su primer libro en 1936 para hacer la crónica de sus descubrimientos. En 1945 fundó Huna Investigación. En 1953, publicó La Ciencia Secreta en el trabajo como un libro de texto Huna, y en 1965 Los Códigos Huna en las religiones, el examen de paralelismos con Huna en religiones como el hinduismo, el budismo y el cristianismo. (Wikipedia 09/17/2010 )



*Fuente: http://en.wikipedia.org/wiki/Huna_(New_Thought)
https://www.facebook.com/AboutHuna
 

jueves, 13 de marzo de 2014

Suelo pélvico en la danza Polinesia



Actualmente es muy popular trabajar el suelo pélvico a través de la danza oriental, pero no sólo esta danza es idónea para trabajar esta parte del cuerpo, tan importante para la mujer. Las danzas de la Polinesia también son excelentes para este tipo de ejercicios al trabajar ondulaciones con la pelvis.
 

La danza para la Mujer
Tanto a nivel energético, como respecto al funcionamiento del sistema respiratorio, la danza Polinesia aporta beneficios similares al yoga o al tai-chi, ya que refuerza el sistema nervioso a través de la relajación, la concentración y el ejercicio físico, además de hacer un trabajo importante de concienciación corporal.
1- Refuerza la musculatura de todo el cuerpo, en especial de la zona abdominal y pélvica. Por tanto, en las clases de danza Polinesia se corrigen vicios posturales y se mejora la alineación del cuerpo. Se mejora la postura.










2- La danza Polinesia conecta a la mujer profundamente con su feminidad, ya que los órganos internos se estimulan a través de movimientos específicos de la región pélvica, los abdominales y de la respiración. Todo el cuerpo trabaja: los glúteos, los muslos y el vientre se contraen, reforzando la musculatura y modelando las caderas y la cintura.
3- Refuerza la autoestima y la confianza en una misma. Ayuda a reencontrarse y sentirse a gusto con una misma. Permite desinhibirse y vencer barreras psicológicas y la timidez.
- Por supuesto, la práctica de la danza Polinesia trabaja también la coordinación corporal y la sincronización del movimiento con la música.

1- LAS CADERAS Y LA POSTURA
- Se trabaja en profundidad el equilibrio corporal y la postura a través del trabajo de la región pélvica y los abdominales.
 - Mantiene y desarrolla una mayor flexibilidad articular y el fortalecimiento óseo. Evita la rigidez y retrasa el colapso final de las lumbares
-Las caderas evocan a la vez a la pelvis, que sostiene la columna (su posición influye sobre las curvas de la columna).

2- EL PLACER DE SER MUJER
- La danza se revela como una técnica de concienciación corporal que conecta con la memoria ancestral de todas las mujeres. Con ella la mujer gana más confianza en ella misma, desbloquea la rigidez del cuerpo sometido a toda clase de malas posturas, represiones sociales y culturales, y pasa a expresarse con más autenticidad.
- Muchos ginecólogos recomiendan la danza por sus numerosos beneficios para la mujer y por la capacidad de trabajar los órganos internos femeninos.
- Al hacer circular mejor la sangre y estimular determinados músculos, puede disminuir los dolores de la menstruación, aplazar la llegada de la menopausia o aminorar sus trastornos fisiológicos y psicológicos. También puede facilitar el parto porque influye en las contracciones pélvicas y del útero.
3- FORTALECER LA AUTOESTIMA
- Practicando danza Polinesia realizaremos un trabajo corporal completo que ayuda a la mujer a descubrir su propio cuerpo y a valorarse. Funciona también como terapia mental, ya que al entrar en contacto con el propio cuerpo, a partir de las manifestaciones de expresión corporal, hay un desbloqueo psicológico, despertando el amor propio.
- Según algunos expertos, la danza puede diluir las corazas musculares preconizadas por Wilhem Reich, y que constituyen segmentos del cuerpo humano que concentran tensiones, emociones y sentimientos reprimidos que alteran la estructura y postura corporal. Al proporcionar el desbloqueo de estas corazas, la danza se refleja también en el comportamiento del individuo, que pasa a sentirse más libre y más feliz.
- La psicopedagoga Teichi León cree que la danza proporciona una liberación de hormonas, principalmente las suprarrenales (glándulas endocrinas situadas sobre los riñones) que, al entrar en la circulación sanguínea produce euforia y elimina o aminora las depresiones. Puntualiza: “por supuesto que esta danza no es ninguna panacea pero puede ayudar mucho al inculcar alegría en la practicante; produce relajación y desentumece el cuerpo. Algunos movimientos son capaces de liberar la agresividad femenina y canalizarla.”